(Con los mejores deseos para el 2011)
No llevo la cuenta de los que ya pasaron
pues sería restarle un grito al aire.
Tan sólo hago memoria de algunos,
los que sabes;
del resto, quedarán ocultos, perros,
empañados por la niebla, borrosos
como bultos apilados en un hueco sin remite.
No me importa demasiado ese oscuro
destino que les guardo. Tuvieron en su mano
el mirto y el laurel de las gestas cotidianas,
mas le tuvieron miedo al viento, al suelo
de las calles, a la mirada vigorosa
de las vírgenes vestales.
-merecen el destierro-
Tanto llover de días
siempre rectos me empapa la ilusión
de viejas puertas y me descubro como avaro
contador de calendarios y relojes.
Pero se que vendrán otros nuevos con sus mares
y sus cuentos,
traerán en la mochila semillas de alcanfor
y olor a quiero; me ofrecerán el fruto del manzano
amargo y, aquí sin Dios, os juro que escupiré su piel
y libaré del zumo.
...
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4 comentarios:
vendrán muchos nuevos..... que para tí sean de confeti y sonrisas
Besos y abrazos de recién estrenado años
No hay que borrar ningún día del calendario ni dela memoria, porque de todos aprendemos.
Hasta a saber llorar hay que aprender.
Me encanta lo que escribes.
Saludos.
Hola Ignacio!!
Vendrán nuevos y se irán,harán su camino,como los antiguos hicieron,pero es importante aprender de todo en cada momento de la vida.
Un abrazo y que tengas toda la dicha que anhelas en este nuevo año!!
"Pero se que vendrán otros nuevos con sus mares
y sus cuentos,
traerán en la mochila semillas de alcanfor
y olor a quiero; me ofrecerán el fruto del manzano
amargo y, aquí sin Dios, os juro que escupiré su piel
y libaré del zumo"
Me gusta especialmente este final lleno de fuerza y decisión, de esperanza al fin y al cabo.
Da gusto, levanta el ánimo.
Estupendo Ignacio.
Un beso.
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