miércoles, 21 de septiembre de 2011

DESCRECIENDO (alzheimer)




DESCRECIENDO


Olvidar
es un trabajo amable
fecundo en resultados.

Me aplico y sin esfuerzo
millones de lagartos devoran
con ritmo diluviano
marañas que forjaron
mis cariños, lastres
pegajosos por queridos,
molestas trazas
cerebrales de aquello
que escogí
cuando era humano.

Un perezoso avanza en retroceso
subiendo hasta las venas
del recuerdo; mastica
y se alimenta de golosos sustantivos
-nombres propios sin sonido-
desnudándome paciente
con su bruma
-un diente triturando el acertijo-.

Dentro de mí
renazco enrabietado
en niño grande;
tras cada axón ausente
me acerco al objetivo:
desconexión tenaz y programada
hasta mi nada herida.

A veces
las arañas se resisten
laboriosas y urden viejas
tramas viejas que galopan,
a veces,
azules los destellos…

-Olor que fue verano

tu beso en mi mejilla

tu rostro junto al mío

tu mano y mi extrañeza-

…retazos que salpican
mientras yo, jugando al
escondite
me oculto en mi guarida
vacía de emociones.

¡¡Oh!! Retorna el niño
que no era
descreciendo por momentos

¡¡atrás, atrás, al útero gigante!!

Vuelvo a ser lo que no fui,
oscuro y negro eterno
como antes,
como antes de haber sido:

vacío, vacío, vacío…

¡Sentid el universo pleno!


***

1 comentario:

estrella dijo...

Hola Ignacio!!

Entrañable poema del olvido,me ha emocionado.

Yo he escrito algo también al respecto,pero tú lo dices de una forma inigualable,hasta el mismo vacío hacia la nada...menguando,descreciendo.

Mi admiración por los familiares de estas personas

Un abrazo