domingo, 4 de enero de 2015

Pues eso.... domingo y cuento























LA RANA Y LA CHARCA


Después de zamparse al grillo
la rana Facunda salió a pasear,
y al fondo de un largo pasillo
descubrió una charca cual el mar:
reluciente y con más brillo.

“¡Albricias! Croó pasmada
jamás conocí otro lugar
con el agua tan calmada
que entran ganas de nadar.

Y además no hay enemigos
que me puedan espantar
pues no veo ningún anfibio
ni se escucha otro croar.

El entorno es primoroso:
Verde hierba, suave arena,
altos chopos, seto hermoso
y un montón de larvas tiernas.

Aquí me quedaré a vivir,
que parece el paraíso
pues consigue reunir
todo lo que yo preciso”.


La rana se durmió encantada
al borde mismo del agua clara;
ya sería la mañana bien pasada
que oyó ese estruendo muy asustada.

Un humano griterío la aturdía
mientras unas cuantas manos
señalaban con el dedo su guarida
y otras tantas la prendían sin cuidado.

En un frasco la pusieron con presteza
sacándola por la puerta principal
pero no pudo leer, cegada por la tristeza,
ese cártel que decía: “Piscina Municipal”

Y es que leer es imprescindible
pues si Facunda hubiera sabido
nunca se habría metido
en un lío tan terrible.


***

1 comentario:

Laura Caro Pardo dijo...

Muy divertido...
Un saludo y...feliz año.